El juego de los espejos

Ultimamente me estoy encontrando con personas que me muestran situaciones, retos y aspectos en los que veo reflejadas mis propias características y áreas de mejora.

Una persona que se desvive por quienes trabajan con ella, sean colaboradores o clientes.

Una persona que se entrega en el trabajo más allá de lo exigido buscando hacer bien y sentirse útil, dejando a un lado su propio proyecto.

Otra que se exige niveles de perfección en sus tareas que le llevan al estrés y a tensar sus relaciones con las demás porque espera lo mismo de ellas.

Otra que no planifica ni organiza sus tiempos y lleva la empresa a golpe de improvisación.

Personas creativas que no se ocupan de poner en valor o hacer útiles sus creaciones.

Personas que se bloquean ante una decisión esperando que la situación se resuelva casi por sí sola.

Personas enérgicas y alegres.

Personas escépticas y apáticas.

Personas que más que vivir, están haciendo "como si" vivieran dejando pasar momentos únicos de sus vidas.

Y así en muchos y diversos casos que tienen en común dos puntos : 

1. Son mis espejos en los que veo aquello que por mí mismo no vería.

2. Me indican algo que está en mí y que puedo aprender, mejorar, gozar, permitirme, reconocerme, regalarme, etc…si lo que quiero es que la otra persona avance.

Sí, primero he de cambiar yo para facilitar el cambio en el otro.

¡Que hoy tengáis muchos espejos en los que ver toda vuestra riqueza!