A) Las mejoras "incrementales" en las que mejoramos aquello que hacemos y sabemos. Es más y mejor de lo mismo.
B) Las mejoras "radicales", las innovaciones propiamente dichas, que afectan y cambian la "raíz" de lo que pensamos, hacemos y sabemos.
Hoy, la crisis nos está llevando a cuestionarnos los paradigmas sobre los que se basaron funcionamientos anteriores.
Esto también lo podemos aplicar a nuestras propias vidas.
Si nos centramos en mejorar nuestra propia imagen, competencias, capacidades, condiciones de vida…estamos haciendo mejoras y ¡bienvenidas sean!.
Si, además, experimentáramos nuestra auténtica identidad, lo que somos más de allá de lo que creemos ser, estaríamos haciendo un cambio radical en la manera de concebir nuestra vida. Nos abriríamos a nuevas posibilidades y nuevos trayectorias, relaciones y proyectos de vida.
Esto me recuerda un texto de Marianne Williamson
"Lo que más miedo nos da no es ser incapaces. Lo que más miedo nos da es ser poderosas más allá de toda medida. Es nuestra luz, no nuestra oscuridad, lo que más nos asusta". «¿Quién soy yo para ser una persona brillante, hermosa, dotada, fabulosa?» En realidad, ¿quién eres para no serlo?"
¡Que hoy innoves en tu vida, además de ir mejorándola!
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